Cuando piensas en fútbol americano probablemente la primera imagen que aparece en tu mente es la de un montón de tipos con cascos cayéndose encima. Y es que si algo distingue a este deporte es lo violento que suele tornarse. Por supuesto, con la violencia vienen los golpes, los accidentes, los dolores y el sufrimiento: la parte fea más allá del espectáculo atlético.
“Concussion” es un drama que nos remonta al momento en que el patólogo forense nigeriano Dr. Bennet Omalu (Will Smith) descubre en Pittsburgh un deterioro neurológico similar al del Alzheimer mientras le realizaba una autopsia a Mike Webster (David Morse), exjugador de la National Football League (NFL). Omalu bautiza el desorden como encefalopatía traumática crónica (CTE, por sus siglas en inglés) y publica sus hallazgos es una revista científica. Mientras otros atletas comienzan a padecer del mismo panorama clínico, el luchador doctor se adentra en una misión de educar al público sobre los peligros de los golpes a la cabeza ocasiones por el fútbol americano. Como es de esperarse, enfrentarse a una industria de ocho mil millones de dólares y a la fanaticada que mantiene a este deporte en un pedestal no será una tarea fácil para el laborioso doctor.
Para entender el filme no hay que ser un experto en dicho deporte. Lo importante es lo casi obvio: que tanto impacto a largo plazo no le hace bien al cuerpo. Y digo “casi” porque a todas estas, tuvo que ir un doctor de África a Estados Unidos para darse cuenta de la seriedad del asunto.
Como documento histórico, “Concussion” es relevante, pues se trata de un hallazgo científico que al momento permanecía un misterio, pues nadie había estudiado tan a fondo los impactos físicos al cerebro y sus serias repercusiones neurológicas, haciendo que hombres fuertes y saludables no llegaran ni a los 50 años. El doctor Omalu es un fajón y aunque la película lo demuestra, creo que pudo haberle sacado más partido a esto. Pienso que restarle un poco de enfoque a su vida personal y añadirlo a su lucha por que se conociera la verdad de sus hallazgos hubiese sido beneficioso para el filme.
Otro aspecto interesante del filme es el contraste entre el sueño americano del Dr. Omalu y la realidad a la que se enfrenta tras publicar su estudio, aún cuando su aportación es muy importante para la salud de los estadounidenses. Además, presenta cómo el dinero en ocasiones compraba a los médicos con tal de salvaguardar la industria del fútbol americano, convirtiendo el juramento de Hipócrates en el juramento de hipócritas.
La actuación de Will Smith es potente. Nada queda del “Fresh Prince of Bel Air” en su transformación como el doctor Omalu. Su actuación es sencilla y minimalista, pero muy funcional.
Aparte de Smith, se le suman como elenco Alec Baldwin, Albert Brooks, Gugu Mbatha-Raw, David Morse, Arliss Howard, Adewale Akinnuoye-Agbaje, Mike O’Malley y Luke Wilson, por mencionar algunos, y sus actuaciones funcionan bien dentro del filme.
Recomiendo “Concussion” para aquellos que quieran conocer más sobre los hallazgos de este hombre y los retos que enfrentó a la hora de divulgar la verdad.
La película está basada en el artículo “Game Brain” de la revista GQ, escrito por Jeanne Marie Laskas. Peter Landesman, director del filme, también preparó el guión.
Productora: Columbia Pictures / Sony Pictures
Clasificada: PG-13
Duración: 2:03
Calificación: 3.75/5