La primera “Fantastic Beasts and Where to Find Them” resultó ser una grata sorpresa. Fue agradable volver al mundo de Harry Potter y la creatividad de la escritora británica J.K. Rowling. Regresar otra vez con “Fantastic Beasts: The Crimes of Grindelwald” continúa siendo chévere, pero… ¿Qué más nos ofrece el filme?
En este, Albus Dumbledore recluta a su una vez alumno Newt Scamander para frustrar los planes de Grindelwald de criar hechiceros de sangre pura para gobernar sobre los seres incapaces de hacer magia. Scamander acepta el reto, sin imaginarse los peligros que tendrá que enfrentar. El amor y la lealtad serán puestos a prueba, aún entre amistades y familia, en un mundo muy dividido.
Esa es la sinopsis oficial, y sí, todo eso ocurre, pero el filme más bien parece concentrarse en un personaje: Credence Barebone. Credence, interpretado por Ezra Miller, no es un personaje muy atractivo a nivel actoral. Es muy poco dinámico, y solo anda cabizbajo y con cara de apestado. Va por la vida ansiando conocer su procedencia, y daría lo que fuera a cambio de la información. Dedicarle un filme no me pareció muy adecuado.
Las actuaciones fueron buenas. Mientras que la relación entre Queenie y Jacob era encantadora en el primer filme, en este se muestra más accidentada y no tan adorable. Jude Law hizo un buen rol de Albus Dumbledore, aunque su participación no es muy amplia.
Retoman sus roles Eddie Redmayne como Newt, Katherine Waterston como Tina, Dan Fogler como Jacob, Alison Sudol como Queenie, Zoë Kravitz como Leta Lestrange, y Johnny Depp como Grindelwald.
En cuanto a las criaturas, los efectos visuales, las escenografías y la animación es lo más que llama la atención en el filme. Es sencillamente un espectáculo a la vista. Lamentablemente, lo mismo no se puede decir de la historia. Todo parece ir generando expectativas para una gran revelación al final, que, a fin de cuentas, no es ni tan impresionante. Sí tiene varias conexiones con las películas y libros de Harry Potter, algo que celebrarán los fanáticos de la saga (en la sala de cine, celebraron hasta la primera escena en que aparece el Hogwarts School of Witchcraft and Wizardry).
“The Crimes of Grindelwald” entretiene, pero hasta ahí. Se siente que estiraron el chicle para justificar los cinco filmes que saldrán de “Fantastic Beasts and Where to Find Them”. Dentro de todo, pasa muy poco como para justificar que se sienta como un filme completo, a pesar de sus más de dos horas de duración. Es más bien un puente transicional.
La mejor forma de describir “Fantastic Beasts: The Crimes of Grindelwald” es como una película “OK”. Ve a verla con las expectativas bajas, y a sabiendas de que faltan tres películas más para contar la historia completa.
Estudio: Warner Bros. Pictures
Director: David Yates
Guión: J.K. Rowling
Clasificada: PG-13
Duración: 2:14
Género: Fantasía/Aventura
Puntuación: 3/5