“Que se queden en su país” se le escucha decir a algunos ante la amenaza de ébola en estos tiempos, algo que contrasta con el tema del drama “The Good Lie”, pues trata de inmigrantes africanos que obtienen la oportunidad de vivir en Estados Unidos. Hoy estrena en los cines Fine Arts de Puerto Rico.
“The Good Lie” narra la historia real de un grupo de jóvenes que cuando tenían entre 7 y 11 años huyeron de sus aldeas durante la guerra civil de Sudan. En el proceso, pierden a sus familias, solo se tiene a ellos mismos. Para sobrevivir caminaron por desiertos y montañas hasta que llegaron a un campo de refugiados en Kenya, desde donde algunos fueron llevados a Estados Unidos para iniciar una nueva vida.
Como elenco, cuenta con Reese Witherspoon, Sarah Baker, Corey Stoll, Arnol Oceng, Ger Duany, Emmanuel Jal, y Kuoth Wiel –estos últimos cuatro siendo verdaderos refugiados sudaneses, o relacionados a estos de alguna forma. Curiosamente, las actuaciones más destacadas son las de los refugiados.
Es un filme con mucho corazón, que me recordó a películas como “The Blind Side” y ‘The Visitor”. Aunque el filme es bueno y lo recomiendo, creo que algunas cosas las pudieron trabajar de una manera más efectiva, y principalmente me refiero a la estructura.
Me hubiese gustado que abarcaran más el proceso de adaptación de los sudaneses en el nuevo mundo que era para ellos Estados Unidos, pero todo el inicio del filme es el relato de cómo lograron escapar y sobrevivir la guerra civil. Quizás a través de “flashbacks”, esa historia se pudo haber intercalado y acortado un poco para dar más espacio a la adaptación de estos en sus trabajos y vida en Estados Unidos. En la adaptación se concentra el humor y gran parte del drama del filme, por lo que hubiese sido bueno que se le diera más peso a esto.
El final tiene que ver con el título, pero no se siente ese ritmo ascendente en el flujo del filme, ese “buildup” de resolver el conflicto. Este se trabaja como una cadena de incidentes que más bien te guían hasta el final.
“The Good Lie” tiene un buen mensaje. Es relevante, pues muchos viven en la ignorancia del sufrimiento y sacrificios que tienen que hacer los inmigrantes para conseguir una mejor calidad de vida. En resumen, es un filme sobre sacrificios, bondad, unidad familiar, el saber aprovechar oportunidades, el respeto y la paz mental de una conciencia tranquila.
Al final, culmina con un proverbio africano que me siento tentado a compartirlo aquí, pero prefiero que lo vean y lo analicen ustedes mismos al ver el filme.
Philippe Falardeau dirigió el filme y Margaret Nable escribió el guión.
Clasificación: PG-13
Duración: 1:50
Calificación: 4/5