Ocasionalmente, sale una película sobre latinos cruzando la frontera de Tijuana para entrar a los Estados Unidos, un tema que a estas alturas en que el presidente Obama habla sobre una reforma migratoria sigue siendo relevante. El drama “Guten Tag Ramón” presenta el mismo concepto, pero en un entorno. Estrenó el jueves en los cines Fine Arts de Caribbean Cinemas.
El filme narra la historia de Ramón, un joven mexicano de 18 años que infructuosamente ha intentado cruzar la frontera de los Estados Unidos cinco veces. Sus oportunidades en el hogar son escasas, y las malas decisiones son demasiado accesibles. Decidido en no entrar a la vida del crimen, decide viajar a Alemania y ponerse en contacto con la tía de un amigo, quien reside allá. Sin embargo, todo su panorama cambia cuando no logra conseguirla.
En su lucha por sobrevivir la vida de desamparado, se encuentra con Ruth, una octogenaria retirada y solitaria. Para sobrevivir, deberá confiar en esta.
“Guten Tag, Ramón” es una película bonita, que muestra que igual que hay gente mala en el mundo, también hay gente de corazón noble, aún cuando existen las limitaciones del lenguaje y los prejuicios.
Las actuaciones son decentes, sobre todo la de Ingeborg Schöner, quien personifica a Ruth. El resto del elenco lo forman Kristyan Ferrer (Ramón), Adriana Barraza, Arcelia Ramírez, Rüdiger Evers y Héctor Kotsifakis.
Lo que más daño le hace al filme es el ritmo lento que lleva, donde se siente que nada significativo pasa que alimente la trama, y más cuando la película tiene dos horas de duración. La película intenta poner un poco de humor en algunas partes, pero más que graciosa, queda como simpática.
Fuera de eso, visualmente muestra hermosos contrastes entre el barrio pobre de México en que residía Ramón y la ciudad alemana a la que se muda.
Jorge Ramírez Suárez escribió el guión y dirigió el filme.
Duración: 2:00
Calificación: 3/5.
