¿Qué harías si tuvieras una máquina del tiempo? Esta es probablemente una de esas preguntas que ya te habrás hecho, puesto que viajar en el tiempo es uno de los conceptos más revisitados cuando se habla de ciencia ficción.
En “Project Almanac” un brillante estudiante de escuela superior descubre junto a sus amistades y hermana los planos e instrucciones para un artefacto misterioso con un potencial sorprendente. Sin embargo, el mismo pondrá muchas vidas en peligro sin ellos saberlo.
La película está dirigida a adolescentes, algo que se puede determinar con tan solo mirar los cortos.
Con Michael Bay como productor, es de esperarse que el filme tenga buenos efectos especiales. No obstante, en su historia y ejecución tiene un amplio terreno para mejorar. Sus escenas se sienten desorganizadas en ocasiones, y espera hasta muy tarde para presentar un problema cuya solución luego resulta atropellada. Sí ocurren algunas situaciones graciosas y “tiernas” durante el filme, pero nada como para caerse de la silla.
Las actuaciones son decentes como para cargar con la sencilla historia que presenta, y estas las aportan Jonny Weston, Sofia Black-D’Elia, Sam Lerner, Allen Evangelista y Amy Landecker, entre otros.
Algunos elementos desafían la lógica en cuanto a la funcionalidad de la historia, lo que le resta credibilidad y motivación al filme.
¡Y suficiente con las tomas de cámara en mano! Esto, en vez de añadirle a la película, lo que hace es quitarle calidad, además de ser una técnica que desde “The Blair Witch Project”, se ha estado sobreusando en múltiples producciones. Limitar su uso a algunas escenas hubiese jugado a su favor.
En resumen, “Project Almanac” no reinventa el género de viajar en el tiempo, pero al menos entretiene.
Dean Israelite dirigió el filme, escrito por Andrew Deutschman y Jason Pagán.
Productora: MTV Films, Paramount Pictures.
Clasificación: PG-13
Duración: 1:46
Calificación: 3/5