Residente- El ADN de su música

Muchos en algún momento nos hemos preguntado quiénes fueron aquellos que ocupan el primer lugar en nuestro árbol genealógico. Por lo menos yo lo he hecho, sabiendo que en nuestra sangre boricua hay descendencia taína, africana y española. René Pérez Joglar, rapero y compositor puertorriqueño mejor conocido como Residente, no fue la excepción a esta interrogante, y decidió hacerse una prueba de ADN para conocer la procedencia de sus ancestros. Su documental titulado como su apodo, Residente, ya está disponible en Netflix y en este él nos muestra la travesía que llevó a cabo para realizar su último disco.

Precisamente esos resultados de ADN fueron la inspiración para crear este proyecto. Decidió analizar los resultados de la prueba y seleccionó los países de los que menos esperaba tener sangre, para hacer un viaje. Durante su jornada, visitó lugares en Rusia, China, Georgia, Burkina Faso y por supuesto, Puerto Rico, en busca de inspiración, historias, sonidos, músicos y cantantes que no son reconocidos en la industria de la música. El resultado de esa búsqueda lo llevó a escribir canciones relacionadas a los conflictos armados, leyendas, amor patrio, injusticias sociales, entre otros.

Uno de los aspectos más palpables en el documental es la universalidad de la música. Se puede ver como René en momentos de componer o grabar las canciones en el estudio, tenía un intérprete para que le explicara a los músicos o cantantes lo que quería plasmar en sus canciones, y él trataba de imitar los idiomas para explicar las melodías que deseaba grabar. A pesar de esto, en algunos momentos las palabras no fueron necesarias, y cuando estos escuchaban la música, parecían entenderse por completo aunque no hablaran el mismo idioma. También, algunos de los instrumentos y voces no fueron grabadas en un estudio; fueron grabados en exteriores, con la gente, en sus aldeas, en su hábitat natural; de la forma más orgánica posible.

Sin duda es una producción sin precedentes, que además de permitirnos conocer historias maravillosas de cada lugar que Residente visitó, nos permite ver una versión más íntima e incluso más humana de él, y de su proceso creativo como compositor. Me parece que es un documental muy inspirador, que a quien sea que ame la música, le va a gustar y va a poder disfrutarlo. Es un ejemplo de la responsabilidad que tenemos de abrazar nuestra diversidad y cómo el arte, en este caso, la música, puede unir personas que nunca se han conocido, que son separados por miles de kilómetros de distancia, para crear algo maravilloso.

El documental fue producido por Magnetic2Media, dirigido por René Pérez Joglar y la música la trabajó junto al productor musical hondureño Trooko.

Aquí les dejo el intro del documental para que le echen un vistazo.