Un artista de California regala pequeñas casitas con personalidad para que los necesitados se puedan sentir un poco más seguros y guarecerse del frío cuando duermen en la calle.
El artista, Gregory Kloehn, de Oakland, California, ha puesto su creatividad en buen uso para crear coloridos y acogedores hogares para personas que si no, tendrían que dormir en la calle. Con los materiales que consigue en vertederos y en la basura, Kloehn ha construido 10 refugios móviles hasta la fecha, como parte de su proyecto, el Homeless Homes Project, informó la revista Time.
“Cada hogar está hecho con artículos que encuentro en la carretera: paletas de madera, puertas, piezas de refrigeradores, pintura, etc… Lo único que me cuesta son los tornillos, clavos, pegamento y la gasolina que me toma conducir alrededor de Oakland para conseguir las cosas en la calle. Yo estimo que cada casa me cuesta entre $30 a $50 dólares”, explica Kloehn en su página de Facebook. Con la ayuda de un equipo de voluntarios las casas son donadas a aquellos que las necesitan, y a veces, por aquello de darle un valor añadido, le incluyen una botella de champaña.
Las pequeñas casas típicamente están hechas de paletas de madera y algunas son insuladas con bolsos de entregar pizzas. Cada estructura tiene suficiente espacio como para dormir adentro, además de ventanas, tablilleros, una puerta y detalles básicos, como un espejo o un espacio para poner vasos. Una de las cas tiene espacio hasta para una mascota y una pequeña parrilla.
Relata RealFarmacy.com que inicialmente Kloehn solo construía pequeñas casas para venderlas, pero un día un hombre sin techo fue a su estudio a pedirle una lona. Todo lo que tenía el artista era una pequeña estructura de madera con la que trabajaba, equipada con una cocina integrada, un tanque de agua y un pequeño espacio para desecho humano. Entonces se dio cuenta que esto podría ser un hogar al que este hombre podría darle uso. Y no tan solo usarla, sino que su uso le cambiaría su vida.
Estos refugios sobre ruedas no tienen agua ni electricidad, pero son fáciles de transportar en caso que el dueño tenga que mudarse de lugar. Además, sus techos son construidos con una pendiente, de modo en que el agua no se empoce si llueve.
El artista, que ya publicó un libro titulado “Homeless Architecture”, piensa continuar la construcción de este tipo de vivienda. Además, ha pensado comenzar a dar clases y enseñarle a otras personas cómo construirlas. “Muchas personas escuchan sobre lo que estoy haciendo y quieren involucrarse”, explicó. “Quizás nos reunamos en algún lugar y construiremos un par de hogares juntos”.
Puedes ver algunos de los trabajos del artista en su página oficial.
¡Buen trabajo, Gregory! 🙂
