La guerra es una de esas cosas que probablemente siempre tendremos presente en nuestra condición humana. Por eso, aunque los recuentos se remonten a tiempos pasados, conservan siempre cierta vigencia, pues las formas cambian, pero la violencia, el miedo y el sufrimiento, siempre está presente. Con la intensión de relatar la evacuación de Dunkerque, una ciudad portuaria al norte de Francia, el director Christopher Nolan, responsable de la hasta ahora insuperable trilogía de Batman, nos trae su décimo y más reciente largometraje, “Dunkirk”.
“Dunkirk” es un drama de guerra basado en hechos reales, que nos remonta a las fechas de mayo y junio de 1940, tiempo en el cual Alemania invadió a Francia, atrapando a 400,000 soldados de tropas aliadas en las playas de Dunkerque. Bajo cubierta aérea y terrestre de las fuerzas británicas y francesas, las tropas fueron evacuadas de la playa de forma lenta y metódica, usando cuanto barco militar y embarcación civil se pudo conseguir. Al final de la heroica misión, una gran cantidad de soldados fueron evacuados, contando soldados franceses, británicos, belgas y holandeses, aunque la película brinda un mayor enfoque a las fuerzas británicas. Que conste que no estoy ‘espoileando’… Hablar de Dunkirk sin mencionar el rescate, es como hablar del Titanic sin mencionar su hundimiento: es lo que define la historia.
El nuevo filme de Nolan busca presentar la guerra desde tres puntos de vista: tierra, cielo y mar. El diálogo escasea a lo largo del filme, pues las imágenes suelen hablar por sí solas. Es un buen tributo a los sobrevivientes de la Operación Dínamo, como se le llamó a este rescate, y a los que arriesgaron sus vidas por liberar a estas tropas oprimidas.
En la Segunda Guerra Mundial, tras la Alemania Nazi haber invadido a Polonia en septiembre del 1939, Francia e Inglaterra le declararon la guerra a Alemania, además de establecerles un bloqueo económico. Fue entonces cuando las fuerzas expedicionarias británicas fueron enviadas a ayudar a defender a Francia. En abril del 1940, Alemania invadió a Dinamarca y Noruega; luego lo siguió en mayo del 1940 con Bélgica, los Países Bajos, y Francia, empujando a las tropas opuestas a quedar rezagados en la playa. Esta movida fue bautizada por el primer ministro británico Winston Churchill como “un colosal desastre militar”, explicando que la parte fundamental del ejército británico había quedado varada en Dunkirk, a merced de morir o ser capturados.
¿Por qué verla en IMAX?
Más del 70% de la película fue grabada con cámaras IMAX de 70mm. Por lo tanto, si quieres ver la película en el formato que el director quería, tu mejor opción es verla en IMAX. Tuve la oportunidad de verla en IMAX y ciertamente vale la pena, no solo por la calidad visual de la cinematografía de Hoyte van Hoytema, sino por el sonido. Los efectos especiales hacen que las sillas retumben, metiéndote dentro de la acción, y acrecentando la tensión con la banda sonora de Hans Zimmer.
En cuanto a historia, la trama es fácil de entender. Es una película de supervivencia, que presenta cuanto peligro y miedo podrían haber sentido los soldados que estuvieron allí. Son muy pocos los soldados que llegamos a conocer durante el filme, pues más bien nos sueltan en la acción con ellos, sin mucha información más allá de lo que vemos, y las palabras que expresan en los pocos diálogos.
Las actuaciones fueron muy buenas. El elenco lo componen: Fionn Whitehead, Damien Bonnard, Barry Keoghan, Mark Rylance (del filme “Bridge of Spies”), Tom Glynn-Carney, Tom Hardy (“Mad Max: Fury Road” y “The Dark Knight Rises”), Harry Styles (ex One Direction) y Cillian Murphy (“Inception” y “Batman Begins”), entre otros. Estos personajes trabajan temas tales como: el sacrificio, la desconfianza, el miedo, la frustración, el deber social, el trabajo en equipo, y el desorden de estrés postraumático (PTSD, por sus siglas en inglés). Junto a estos actores colaboraron alrededor de 1,000 extras, lo que ayuda a entender cuán ambicioso fue el proyecto.
La cinematografía es impecable, los efectos visuales y auditivos, también. La banda sonora recuerda en algo a la de “The Dark Knight”, y no es para menos, porque es otro trabajo de Zimmer. Para ser una película de guerra, no es gráfica en su violencia, por lo que mantuvo una clasificación de PG-13.
Sí me hubiese gustado más desarrollo de personajes, aunque puedo entender la decisión de no hacerlo: mientras menos descripción tenemos de los personajes, más testigos encontrará el filme en la audiencia en cuanto a soldados y veteranos. Además, le resta individualismo al relato a la vez que le da fuerza al enfoque de un ejército multitudinario de aliados, como una máquina, como un todo. También esperaba más partes emotivas, pues aunque sí hay mucha tensión, mucho suspenso y miedo, ninguna pérdida me hizo un taco en la garganta. Esperaba además un final que abundara más sobre el contexto posrescate, pues aunque el rescate fue una gran victoria, no fue el final de la guerra. Habiendo dicho esto, “Dunkirk” no deja de ser uno de los mejores filmes de Nolan y una gran película de guerra.
Estudio: Warner Bros.
Dirección y guión: Christopher Nolan
Clasificada: PG-13
Duración: 1:46
Género: Drama/Acción/Historia
Calificación: 4.5/5